Invasión verde. Para el 2030 “será fácil” ver circulando nomenos de 150 mil vehículos eléctricos por las calles de Lima, cifra querepresentará el 6% del parque automotor, ha pronosticado EY en su recienteestudio “Un viaje compartido, diferentes opciones: ¿Latinoamérica entiende sufuturo energético?”, difundido hoy por ElComercio.pe.
El líder de Energía y Utilities de EY para Latinoamérica,Gavin Rennie, sostuvo que en el Perú y en la mayor parte del mundo, para elperíodo 2025-2029, el costo de adquirir un coche eléctrico igualará al de sucontraparte de combustión interna (diésel, gasolina o gas). Sin embargo, estefenómeno se vivirá con mayor anticipación en China para los años 2020-2025;aunque con mayor retraso en Arabia para 2030-2035, debido a la no aplicación desubsidios.
“Estamos hablando de una ventana en la cual las empresas quemanufacturan vehículos tradicionales van a alcanzar las economías de escala queles permitirán vender VE (vehículos eléctricos) a precios competitivos. Esosignifica que al público le será indiferente comprar un VE o uno tradicional”, analizóGavin Rennie.
Pese a los grandes avances en el transporte limpio a nivelmundial, cabe reconocer que en el Perú la masificación de autos 100% eléctricostodavía es incipiente, debido a la ausencia de políticas públicas de promoción deuso y por la falta de una infraestructura de estaciones de recarga de energía,o también llamadas electrolineras.
El especialista en Movilidad Eléctrica de ABB, EdwinZorrilla, en una anterior entrevista con el diario El Comercio, destacó que laelectricidad es 5 veces más económica que el diésel y el mantenimiento es menoral 50% de un auto a combustión, debido a que el motor eléctrico es mucho máseficiente y tiene menos partes móviles.
“En cuanto a velocidad, compare uno eléctrico o uno congasolina. Los autos eléctricos comerciales llegan a 160 y 180 km/h, pero losdeportivos como Tesla, Audi e-tron, Porsche igualan a sus pares a combustión ylos superan en aceleración, que es una ventaja de los eléctricos”, precisó aldiario El Comercio.