“Al finalizar el 2023, el 11.64% de hogares de todo el Perú contaba con un auto/camioneta, superando en 0.53 puntos porcentuales el nivel registrado el año anterior. En tanto, la tenencia de motocicletas se situó en 16.54%, mayor en 0.97 puntos porcentuales a tasa anual. Asimismo, la tenencia de mototaxis avanzó 0.69 puntos porcentuales a 8.97%; mientras que en el caso de bicicletas y triciclos la cifra se ubicó en 15.68% y 0.91%, respectivamente, incrementándose en 0.17 y 0.11 puntos porcentuales en cada caso”, así lo sostuvo la Asociación Automotriz del Perú luego de revisar cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), las cuales ponen en evidencia que durante el año pasado la tenencia de vehículos en los hogares peruanos se incrementó, a nivel nacional.
Para la AAP, el análisis por nivel socioeconómico (NSE) muestra que entre las familias del estrato NSE A, el automóvil/camioneta es el vehículo de mayor tenencia, en donde el 38.96% de ellas al menos tiene uno. Del mismo modo, el 29.02% de las familias del NSE B cuentan con al menos un auto/camioneta. En cuanto al NSE C, el vehículo con mayor tenencia también fue el automóvil/camioneta con 21.05%. Es importante señalar que dichos NSE cuentan con los mayores niveles de poder adquisitivo, lo que explica la mayor tenencia de automóviles y camionetas en los referidos segmentos, vehículos con mayores costos de adquisición y operación.
En tanto, en el NSE D, la bicicleta es el vehículo con mayor tenencia (19.38%). Sin embargo, el vehículo motorizado preferido es la motocicleta, con 17.28%. Por último, en el NSE E, la bicicleta también lidera la tenencia (17.05%), mientras que la motocicleta es el vehículo motorizado con mayor tenencia (16.62%). En estos últimos dos segmentos, la motocicleta se presenta como la mejor alternativa motorizada para movilizarse debido a su versatilidad, bajo precio de adquisición y menor costo de operación respecto a otras opciones.
Del mismo modo, se observó que la tenencia de autos y camionetas es mayor en los NSE más altos (A y B), lo que estaría asociado a un mayor poder adquisitivo; mientras que las bicicletas, motocicletas y trimotos predominan en los NSE más bajos (D y E), debido a su asequibilidad y adaptabilidad a condiciones de transporte personal, de carga y como herramienta de trabajo. Precisamente, los hogares pobres, especialmente los no extremos, tienen una mayor dependencia por vehículos menores, ya que no solo son medios de transporte sino también puede ser utilizados para la generación de ingresos. Cabe precisar que dichos hogares suelen ubicarse en localidades en donde el transporte público no siempre está disponible.
Finalmente, la Asociación Automotriz del Perú consideró que la información recogida resalta la necesidad de contar con políticas públicas diferenciadas que aborden las problemáticas del transporte según la región y nivel socioeconómico. Del mismo modo, se evidencia cómo las condiciones económicas, geográficas y climáticas influyen en las preferencias de transporte, lo que puede ser clave para futuras planificaciones de infraestructura y movilidad urbana.