Corolla Cross H2 Concept: El nuevo coche de explosión de hidrógeno de Toyota

Toyota tiene muy avanzado el desarrollo de su Corolla Cross H2 Concept, un prototipo de automóvil con motor de explosión que en lugar de alimentarse mediante combustibles fósiles lo hace con hidrógeno. El prototipo se está construyendo gracias a todo lo aprendido por la marca japonesa en las competiciones de automóviles de hidrógeno y, según afirman, está a un 40 por ciento de estar listo para su comercialización.

Según la compañía japonesa, el Corolla Cross H2 de hidrógeno tiene el mismo motor 1.6l turbo de tres cilindros que lleva el GR Corolla de combustión de hidrógeno y que ha participado en todas las carreras de resistencia Super Taikyu de Japón. Ese motor cuenta con tecnología de inyección directa de hidrógeno a alta presión y en su versión comercial será capaz de llevar a cinco pasajeros y su equipaje. “Esta actividad automovilística regular e intensa ha contribuido a acelerar la actividad de desarrollo y el progreso técnico”, asegura la compañía. “Por ejemplo, en el transcurso de una temporada de Super Taikyu, Toyota ha sido capaz de aumentar la potencia de combustión del hidrógeno en un 24 por ciento y el par motor en un 33% logrando un avance de rendimiento dinámico equiparable al de un motor de gasolina convencional. Además, la autonomía se ha ampliado en torno a un 30 por ciento y el tiempo de repostaje se ha reducido de aproximadamente cinco minutos a un minuto y medio”.

La compañía dice que, además de continuar con el desarrollo digital de su prototipo, también está probándolo ya en condiciones reales y se está preparando para comenzar los test de invierno en el norte de Japón. Por ahora, dicen, están al 40 por ciento de terminar este desarrollo y comenzar la comercialización de este tipo de vehículos.


El gran problema de esta tecnología sigue siendo el alto coste del litro de hidrógeno verde, el que se produce mediante fuentes renovables en lugar de combustibles fósiles y que no genera emisiones. El hidrógeno verde cuesta entre puede llegar a rondar los siete dólares el kilo, sin embargo, las proyecciones prevén que su coste se aproxime los dos dólares el kilo en 2030 y a uno en 2050. Además, los científicos e ingenieros están encontrando soluciones alternativas que son más baratas y eficientes. De hecho, últimamente hemos visto algunas tecnologías nuevas que pueden solucionar muchos de los problemas que están ralentizando su adopción.