¿Cómo será la política climática y medioambiental de Donald Trump? Sin duda, es una que, aparentemente, no favorecerá a la transición a energías limpias. El mandatario electo de los Estados unidos es conocido por su escepticismo del cambio climático. Sus promesas de campaña son claras.
- Promoverá la extracción de combustibles fósiles.
- Eliminará los beneficios fiscales tanto para vehículos eléctricos como para proyectos de energía limpia.
- Desmontará las protecciones ambientales existentes.
- Buscará recuperar el dinero aún no utilizado de lo que él denomina la «nueva estafa verde». Refiriéndose a la histórica ley climática impulsada por el presidente saliente Joe Biden.
El Proyecto 2025 y sus planes son muy parecidos. Este tiene una extensa guía de 900 páginas, elaborada por la ultraconservadora Fundación Heritage. Trump ha marcado distancia de esta iniciativa. Pero es muy revelador que varios de sus autores fueron propuestos para ocupar posiciones estratégicas en su gobierno.
Política climática y medioambiental: ¿Qué opinan los especialistas?
Rachel Cleetus, directora de políticas climáticas y energéticas de la Unión de Científicos Preocupados (UCS): «No nos hacemos ilusiones», advierte. «Son anti-ciencia en su núcleo». La experta señaló que no hay indicios de que vayan a utilizar la investigación climática científicamente validada para desarrollar políticas que beneficien al público.
«En lugar de juicio independiente y experiencia, hay mucha lealtad casi sectaria a un presidente que ha tomado una postura muy dura contra la energía limpia, completamente sometido a los intereses de los combustibles fósiles», remarcó.
El contexto es realmente preocupante. Trump tendrá el respaldo de ambas cámaras del Congreso y una Corte Suprema de mayoría conservadora. Al menos hasta las elecciones de 2026. «Todo eso junto, es un panorama muy sombrío», dijo Cleetus.
Debilitación de la acción de la Agencia de Protección Ambiental
Para dirigir la Agencia de Protección Ambiental (EPA), Trump ha elegido a Lee Zeldin. Este excongresista de Nueva York se opuso sistemáticamente a la protección ambiental y a las inversiones en energía limpia. Una ONG que rastrea el apoyo político a las políticas verdes le dio una puntuación del 14 % por su historial de votación.
Ante ello, se espera que el nuevo jefe de la EPA desmantele las regulaciones introducidas por Biden. Las mismas referidas a contaminación del aire, agua, perforación y sustancias tóxicas. Repitiendo lo ocurrido en 2017, cuando Trump sucedió a Obama.
«Prometen aire y agua limpios. Pero planean eliminar todas las normas que protegen la salud pública y el medio ambiente», advierte Cleetus. «Están hablando de recortar presupuestos y el personal en todas estas agencias».
Por su parte, Mandy Gunasekara, exjefa de gabinete de la EPA con Trump y colaboradora del Proyecto 2025, señaló que la intención es «derribar y reconstruir» la agencia. Cabe recordar que, en el primer mandato de Trump, la EPA perdió más de 1.100 empleados. Asimismo, se vieron debilitadas más de 100 regulaciones ambientales.
Trump: «¡Perforen, perforen!»
La promesa estrella de Trump en campaña fue impulsar la extracción de combustibles fósiles. Este sector que ya registra ganancias récord. Promete restaurar la «independencia energética» de Estados Unidos y reducir a la mitad los precios de la energía.
Para dirigir el Departamento de Energía, Trump ha nominado a Chris Wright. Él es CEO de Liberty Energy, una empresa especializada en fracking y gas natural. Wright, conocido escéptico del cambio climático, defiende fervientemente los combustibles fósiles. En una ocasión, señaló que «no existe tal cosa como energía ‘limpia’ o ‘sucia'».
En tanto, Tim Tarpley, presidente del Energy Workforce & Technology Council, anticipó que la nueva administración acelerará el fracking en tierras federales. Asimismo, agilizará los permisos para proyectos petroleros, incluso en el Golfo de México.
¿Qué pasará con la energía limpia y los autos eléctricos en Estados Unidos?
Desde enero, Trump apunta contra las energías renovables y los vehículos eléctricos. Su objetivo es eliminar los mandatos federales que reducen emisiones. Asimismo, pretende cancelar los créditos fiscales para energía limpia y coches eléctricos. Los cuales están establecidos por la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) de Biden.
Los obstáculos para Trump
A pesar de todo, algunos especialistas creen que Trump enfrentará obstáculos. Muchos fondos ya están invertidos. Hay proyectos de litio en California. Hay plantas solares en Texas. Así como fábricas de baterías y coches eléctricos en Georgia. Estos empleos bien pagados cuentan con respaldo bipartidista.
Es importante tener en cuenta, que casi el 60 % de los nuevos proyectos de energía limpia, desde 2022, están en distritos republicanos. Estados como Georgia, las Carolinas, Michigan, Arizona e Indiana –que votaron por Trump– se beneficiarán de inversiones que aportarán más de 400 mil millones de dólares a la economía estadounidense.